Belleza: Tres recetas para embellecer tu piel usando leche
Todos sabemos que la leche es buena, por algo se recomienda consumirla por lo menos dos veces al día. En lo personal soy una gran fanática, no tomo café ni té, me gusta tomar leche en la mañana y en la tarde, sin ella no puedo funcionar bien. ¿Sabían que la leche contiene altos niveles de vitaminas A, D y E? Por lo que también la hacen un excelente tónico para la piel, seguramente todos hemos leído sobre la costumbre que tenía Cleopatra de tomar baños de leche e incluso los Griegos en la antigüedad utilizaban el yogurt para casi todo. La leche además es un excelente antiinflamatorio y sirve para aliviar las quemaduras. Y como si fuera poco, contiene ácido láctico, que resulta ser un excelente exfoliante natural.
Buscando por ahí, encontré estas tres recetas para que nuestra piel quede suave y linda con la ayuda de este ingrediente tan versátil.
Baño de leche con chocolate
– 3 tazas de leche entera (si usas leche en polvo, que sean dos tazas)
– 5 cdas de hojas de menta fresca, picadas
– 3 cdas de cacao crudo en polvo (se encuentra en tiendas naturistas)
– 1/2 taza de epsom (sulfato de magnesio)
– 1 taza de maicena
Este baño deja tu piel suave y con un rico olor a chocolate. Llena tu tina con agua caliente hasta que esté un 75% llena. En un bowl aparte, mezcla todos los ingredientes. Luego vierte el líquido en la tina y métete a disfrutar de tu baño por al menos 20 minutos.
Exfoliante facial de leche, miel y azúcar
– 3 cdas de leche (elige leche entera para una piel más seca)
– 3 cdas de miel
– 1 cdta de avena cruda, en migas
Mezcla todos los ingredientes en un bowl hasta que se forme una pasta espesa. Aplica la mezcla en tu piel limpia y masajea con tus dedos durante un par de minutos. Enjuaga con agua tibia y una esponja y seca.
Leche con miel y pepino para limpiar y aliviar la piel
– 1 bolsa de té de manzanilla
– 2 cdas de miel transparente
– 1 pepino pequeño, pelado y sin semillas
– 1 cda de leche entera
Hervir una taza de agua y dejar la bolsa de manzanilla para que repose y se enfríe. Pelar el pepino, sacarle las semillas y molerlo, luego colar la pulpa y guardar el jugo. Revolver el jugo de pepino con la miel y agregar la leche. Aplicar esta mezcla en la piel con un algodón o esponja y luego enjuagar con el té de manzanilla ya frío, pasando una esponja suavemente por la cara.
Realmente les recomiendo estas recetas, han resultado muy buenas para mi piel y espero que para ustedes también lo sea.