Aussie Love
He decidido compartir con ustedes hoy esta historia, porque en caso que se acabe el mundo mañana creo que sería demasiado injusto que mueran sin saber ésta, una de mis historias personales favoritas. Sé que les va a encantar.
Ocurrió el 4 de Julio de este año. Era una noche fría y ese día yo iba a Miércoles Po con dos amigos, Maxi y Alvaro. Para quienes no lo saben, los Miércoles Po son unas fiestas gringas que se hacen todos los miércoles en distintos lugares de Santiago y siempre son temáticas. Esa noche obvio que era un tema patriótico, por ser 4 de Julio. Así que ahí estaba yo, con mis uñas patrióticas y con un abrigo bien rojo. Ese día me curé temprano, porque como es gringa la cosa, a las 10 de la noche la disco ya está llena. Llegué con mis amiguis y a ellos no los dejaron entrar, estaban en lista, pero su dresscode no cumplía con los requisitos, así que no pudieron entrar conmigo.
Yo quería ver qué tal la fiesta, así que entré sola mientras ellos se iban a otra disco por ahí cerca, yo quedé de avisarles cuando salga para que nos juntemos, así que todo ok. Me acerqué a la barra, hablé con un par de minos, me tomé un par de copetes y me dio lata ir a bailar porque no había nadie realmente rico así que llamé a mis amigos y me junté con ellos. Yo estaba en la Ex Fábrica, que queda por Patronato y mis amigos se habían ido al Barrio Bellavista, super cerca.
Tomé un taxi y estuvimos como en tres discos más, tomando, bailando y más que nada tomando. Ya cuando eran las 2.30 am decidimos irnos, habíamos empezado a carretear a las 9 pm, así que ya era suficiente por una noche, además que era miércoles y la gente semi decente como yo igual tiene que trabajar al día siguiente.
Caminamos por Pio Nono, frente al Patio Bellavista, para llegar a Plaza Italia y poder tomar un taxi hacia Ñuñoa, en verdad habíamos decidido seguir carreteando en el departamento de Maxi haha, pero apuesto a que me creyeron eso de que yo era semi decente.
Ok, ahí iba yo caminando con mis amiguis, Alvaro iba super prendido, a esa hora ya era oficialmente su cumpleaños, y yo….iba super curá, abrazada con Maxi porque moría de frío. Íbamos conversando, riendo y pensando en llamar a Fono Copete al llegar donde Maxi….cuando de repente….de la nada….aparece el. El amor de mi vida. (más…)