28 Day Jumpstart Challenge [Día 3]

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A ver, día 3. El día 3 fue….doloroso.

Again, no por que me cueste comer más sano, incluso tampoco por tener que cocinar, es que me duele todo, absolutamente todo. Me duelen partes de mi cuerpo que no sabía que me podían doler y músculos que no sabía que tenía haha.

Hacía miles de años que no me dolía tanto algo. Sé que no es la primera vez en mi vida que me siento adolorida después de hacer ejercicio, sé que otras veces he sentido más dolor, pero una tiende a olvidar esas cosas. Lo que sí les puedo decir, es que esto es lo más adolorida que he estado en todo el año haha.

En fin, con respecto a la cocina el día 3 no fue tan terrible. Me levanté a las 6 de la mañana porque era el cumpleaños de mi mamá y no tenía su regalo 100% listo. Antes de ponerme a trabajar en eso, le di comida a las guaguas y me comí mi avena con fruta. Cada vez me estoy acostumbrando más, no me mata, pero tampoco es una tortura tomar eso de desayuno.

Ahí pueden ver al Rucio haciéndome compañía mientras preparaba el regalo de mi mamá.

Como era un día especial, como era un cumpleaños, adivinen qué. Oh yassss, había torta.

Si hubiese sido una torta que he comido antes, no la habría probado, pero esta era una torta nueva y tenía una capa enorme de merengue y yo amo el merengue.

Sin embargo, me porté súper bien y pedí que pongan un vasito de tequila al medio, para comerme eso.

En verdad mi único interés era el merengue, porque la torta era de hoja y a mi las tortas de hoja no me matan, prefiero mil veces el bizcocho. Así que de hecho ahí pueden ver que el vaso no llegó hasta el fondo, era súper poco, pero tenía merengue suficiente para hacerme feliz. Comí eso y lo acompañé con un tecito chai, estaba la muerte.

Como mi desayuno había sido a las 6.15 y la mini mini mini porción de torta a las 8.30, ya a las 11 de la mañana moría de hambre. Así que comí hummus con zanahoria.

Esta vez lo puse en un plato más fancy para la foto, y ahí pueden ver a la Negrini con mucho interés preguntándose si el hummus es lo suyo. No lo era.

La Chofi, que se cree vegetariana porque ama los espárragos y los palmitos, se interesó mucho por mi snack también, pero no lo quiso probar porque se apiadó de mi, que estaba muerta de hambre.

Ahhh y después de la torta y antes de mi snack, estuve todo ese rato en la cocina dejando listas algunas cosas para mis siguientes comidas. Dejé listos tres frascos con mi avena de la mañana, dejé cortadas las cerezas para los últimos dos días que me toca preparar lo mismo (tengo que desayunar lo mismo hasta el lunes), preparé harto hummus para mis almuerzos, mis snacks y para dejarle a mi familia. Corté el tofu y lo aliñé y metí en un frasco. Creo que eso fue todo, pero me tomó bastante tiempo y después tuve que lavar y ahhhh, pero bueno, era el cumple de mi mamá y por eso mismo me tocó lavar tanta cosa y lo hice feliz porque era su día y yo quería estar de buen humor (y lo logré, yay!).

Además lo bueno es que yo sabía que en la noche íbamos a salir a comer (yo ya tenía mi plan listo para saber qué pedir, más abajo les cuento), así que no iba a tener que preparar nada en la noche y eso me tenía demasiado feliz.

Y a pesar del sufrimiento enorme por el que estaba pasando, hice ejercicio igual. Se mueren que me dolía hasta estornudar haha, me dolían los músculos abdominales bajos, me quería morir. Mi familia no aceptó llevarme en silla de ruedas a comer, lo que me parece una rotería, así que tuve que aguantarme todo el día el dolor y pedirle a mi hermano que me traiga cosas porque pararme no era tan terrible, pero volver a sentarme era atroz.

Se me pasó volando la mañana, así que hice ejercicio como a las 2 de la tarde casi. No me dio para hacer los ejercicios que me correspondían, así que hice cardio no más. De todas maneras los jueves son de cardio (y como adelanto les digo que hoy me siento un poco mejor y haré lo que me correspondía ayer, en vez de hacer cardio). Hice como 5 minutos de calentamiento y 15 de cardio, que fue más que suficiente porque quedé agotada. Me costó ene hacer todo, pero lo hice y por eso estoy orgullosa de mi.

Después preparé mi almuerzo, que cada vez me va quedando más rico y lo voy disfrutando más. Es que es muy bueno en realidad.

Durante la tarde estuve echada, viendo tele y pintándome las uñas, impresionantemente no me dio sueño porque en la guía recomiendan hacer ejercicio más temprano o al menos no tan cerca de la hora de dormir, para que no quedes muy hiperactiva antes de quedarte dormida. Pero a mi me pasa que el ejercicio me deja tan pero tan relajada….y con la ducha de después es peor. Así que soy de esa gente que de lo más bien podría hacer ejercicio antes de dormir. De todas maneras lo bueno es que yo duermo como sea, donde sea y siempre duermo bien y me quedo dormida en segundos. Y cuando despierto siempre tengo mucha energía. De todas maneras dejaré los ejercicios para la mañana porque así puedo continuar con mi día y en la tarde no me da flojera hacerlos porque al final del día una siempre está más cansada o tiene algún compromiso y prefiero dejar el ejercicio listo lo antes posible para no tenerlo como pendiente el resto del día.

La Chofi encima de mi mat de ejercicio, por suerte ya había terminado porque a veces hasta eso le da lo mismo y se echa antes que termines con tu rutina.

A todo esto, se van a morir de risa de mi. Yo les había dicho que los ejercicios de la guía los había encontrado poca cosa y que había decidido hacer todo x3. Bueno…..recién ayer me di cuenta que arriba de los ejercicios, donde aparece el día, dice «x3» hahaha. Así que no soy tan bacán como yo pensaba y la guía no es tan poca cosa como yo creí, pero menos mal me di cuenta a tiempo y había decidido hacer todo x3 de todas maneras. Ayayaiiii, #MomentoRubio.

Tipo 18.30 me comí un snack, mi rico medio plátano cubierto en yogurt natural y congelado.

Después llegó el Rucio a quitarme el cojín porque le encanta amasarlo y echarse encima.

Y sí, en todo el día no hice mi cama porque en casi todo momento hubo un gato ahí y ustedes saben que así no se puede.

A las 20.30 hrs teníamos una reserva en Baco, que queda en Nueva de Lyon con Andrés Bello. Es un lugar que a mis papás les encanta y que a mi me cargó. Entre hoy y mañana haré un review del lugar, así que ahí les cuento más detalles. El lugar está bien igual, pero para una persona que tiende a pedir siempre algo especial que no está en el menú, no es el mejor lugar para visitar porque te van a decir que no a todo y yo odio que me digan que no.

En fin, terminé comiendo quínoa con palta, tomate y pepino y alrededor tiene kale, semillas de girasol y un dressing muy ligero que me gustó bastante. El plato estaba bien en realidad, rico. Pero yo ya estaba molesta porque me dijeron que no cuando pedí que me incluyan un huevo, un maldito huevo, porque lo ideal es comer una porción de algo con harta proteína y no les iba a pedir tofu, pero qué les costaba hacerme un maldito huevo.

Whatevs, me comí eso, traté de fingir que estaba contenta para no arruinarle el cumpleaños a mi mamá, tomé harta agua porque al menos en el lugar te llevan agua a cada rato y eso fue todo lo que comí. No me tenté con lo que comían los demás porque no era Mila friendly (así le digo yo a mi mamá cuando hace algo no vegetariano) y tampoco me interesó comer postre porque he sido una niña buena y ahorraré todas las calorías que pueda, todo sea por comer de vez en cuando un poco de mantequilla de maní, que es la verdadera fuente de felicidad en mi vida.

Y bueno, eso, fue un día muy doloroso porque pucha que me dolían las piernas, lo peor de todo es que no tenía mucha flexibilidad así que para sentarme y pararme tenía que hacerlo de manera rara haha, pero ya pasó y ya me acostumbraré.

De a poco siento que va mejorando la cosa, que me cuesta menos cocinar, que me aprendo lo que tengo que almorzar de memoria (las medidas y todo) y voy teniendo más disciplina, así que me tiene súper feliz.

A pesar de todo, el día 3 fue un día muy bueno, pero me tinca que el día 4 será mucho mejor. Mañana les contaré.

Besis para todas.