Todas hemos tenido uno de esos días, de esos en que te levantas con el pie izquierdo y a partir de ese momento todo te sale mal. Bueno…..yo ahora estoy teniendo uno de aquellos.
Todo partió ayer cuando salí de casa con mi mamá, tipo 4 pm y olvidé llevar conmigo los premios de lectora topísima que postergué un montón por falta de tiempo y justo el día en que al fin había envuelto los envíos bien lindos y podía ir a dejarlos, ¡se me olvida! Típico de mi.
Yo sé que mis lectoras no se van a molestar si tienen que esperar un poco más, pero a mi me dio rabia que se me haya olvidado si yo había salido casi exclusivamente a eso y a hacer un par de compras antes de irme a Antofagasta esa noche. Pero lo olvidé y afortunadamente mi mamá no se hizo problema en quedar de hacer el envío hoy. Aún así me dio lata ser tan volada y haber estado toda la tarde pensando en otras cosas, por eso fue que olvidé por completo llevar los envíos conmigo. Y no fue lo único que olvidé hacer, eso es lo peor.
Como la situación me puso de mal humor, obviamente el resto de mi tarde fue un desastre. No me pasó nada terrible, pero todo lo que tenía que hacer me costó el triple porque tuve que esperar filas eternas porque había gente con problemas en la caja, no encontré cosas que estaba buscando y tuve que recorrer varias tiendas, sin mucha suerte. Me costó ene encontrar un taxi para volver a casa y más encima el camino que tomo siempre, que es más corto estaba desviado y ahg! Todo, absolutamente todo me salió mal.
Lo que más me molesta de todo, es que es mi culpa. Yo me lo merezco por andar enojada y con mala disposición. Si al final todas las cosas que le pasan a una es porque se lo merece. Es el karma, es porque andas idiota, porque fuiste mala onda y se te está devolviendo. También hay cosas malas que te pasan y que quizás no las mereces, pero la vida es redondita y cuando te falla siempre sabe como compensarte (siempre y cuando seas ubicada y agradecida con ella, creo yo). Y cuando andas idiota por cualquier tontera es obvio que te van a pasar cosas mala onda, es la forma que tiene la vida de decirte que la cortes con la pataleta y cambies la actitud.
Si hay algo que no soporto, es la gente llorona que le echa la culpa de todos sus problemas al universo y peor aún, a otras personas. Al que te miró feo, al que crees que te tiene mala, o al simple hecho de que la vida es injusta y te trata mal sólo porque si. Y por sobre todo me da vergüenza ajena ver como gente se queja públicamente, no sólo frente a sus amigos, si no que peor aún por medio de redes sociales, sobre problemas que personalmente, me parecen una estupidez. Lo digo porque yo misma evito quejarme por mis problemas insignificantes, porque tengo perfectamente claro que hay tanta gente que de verdad lo está pasando mal, que le pasaron cosas malas porque simplemente así es la vida y aunque no lo merece, le tocó difícil. ¿Y se han fijado que esa es la gente que jamás se queja? Que siempre sigue adelante y que aunque lo esté pasando mal, no anda lloriqueando frente a los demás o publicando sus tragedias para que todos se enteren de lo miserable que es su vida.
Pucha que ando amargada hoy haha. Pero lo que digo es verdá, me da ataque encontrarme con gente así. A mi todavía me dura la mala racha, anoche llegué tarde a Antofagasta, hacía un calor asqueroso en mi habitación, más que calurosa estaba húmeda, como si estuviéramos en el caribe. Dormí sofocada, tuve mil pesadillas. Pesadillas estúpidas, soñé que despertaba a las 8.45 am en vez de a las 7 am, que iba a trabajar sin maquillaje, que me tocaba interpretar en un lugar enfermo de sucio haha, puras tonteras, pero lo pasé mal, dormí pésimo y vine a trabajar muerta de sueño, cosa que casi nunca me pasa.
Pero mala suerte no más, se me van a tener que pasar las mañas porque si no lo hago, nadie me va a ayudar. Y estas cosas me pasan por andar de malas y rabiar por tonteras. Así es la vida no más, menos mal hoy salgo temprano y tendré tiempo de visitar el mall y dormir temprano y mañana vuelvo en la tarde a mi Santiago querido.
¿Ustedes han tenido un día de aquellos? ¿Les pasa igual que a mi que por culpa de una tontera se enojan y les pasan puras tonteras? De seguro que no soy la única. Me encantaría ser como esa gente que es mega relajada y casi nunca se estresa por tonteras y por lo tanto se evita los malos ratos. Pero whatever, yo soy así y soy histérica y mala suerte no más. Si yo realmente quisiera cambiar, demás que podría, pero probablemente no lo haré porque ser así también tiene sus cosas buenas. Como tengo la mecha corta soy requete buena para alegar y la gente parece que me tiene miedo y me da en el gusto haha.
Además igual ayer no fue un día tan horroroso después de todo. Y tengo que reconocer que lo rico de llegar a Antofagasta es que ya todos me conocen, los de Transvip me esperan con un taxi topísimo y un cartelito con mi nombre, los que trabajan en el counter van hasta el auto a dejarme el voucher y corren para saludarme de beso haha y los del hotel me tratan súper, se acuerdan de todos mis requerimientos de rockstar y me inventan cositas vegetarianas. No me puedo quejar. Mi vida es buena y cuando me pasan cosas malas, son puras tonteras que probablemente a nadie le interesan, por eso no tengo para qué contarles sobre absolutamente todo lo que me pasó, no tengo para qué quejarme de todas las denuncias que estoy poniendo en el Sernac contra todas las tiendas cuyo servicio al cliente es un asco y mucho menos tengo para qué echarle la culpa de mis mañas o las cosas que me han pasado por andar con la nube negra o porque simplemente tuve mala suerte.
¿A quién no le ha pasado que a veces le pasó algo malo porque simplemente tuvo mala suerte no más? Cuando apareces en el lugar equivocado en el momento equivocado y te tocó a ti y mala suerte no más. Así es la vida y una tiene que aceptarlo.
Al menos estoy en mi cabina, en mi ambiente natural, donde me siento cómoda y donde estoy a un par de horas de irme al hotel a dormir siesta e irme de shopping y cambiar la actitud, que si no lo hago yo, la cosa no puede mejorar mucho. He dicho.
Que tengan todas un lindo día y no se amarguen por tonteras como yo, ¡besis!