Mi Familia

Hoy voy a hablarles sobre una de las cosas que más amo en el mundo aparte del glitter: Mi familia.

Voy a partir este post diciendo que estoy muy feliz de haber sido tan afortunada y que me haya tocado tener una familia tan bacán, porque lamentablemente no es algo que le pasa a todo el mundo. A pesar de que así es como debería ser, no todos tienen la suerte de tener unos padres lindos, tiernos y cariñosos que te apoyen en todo y unos hermanos maravillosos con quienes tienes nada más que lindos recuerdos.

¿Qué me gusta de mi familia? Todo. Incluso las cosas malas, haha mentira, pero si no tuviésemos defectos y mañas sería todo demasiado fome porque después no tendríamos de quien burlarnos o a quién imitar cuando anda en sus días de furia. De todas maneras agradezco también el tener una familia normal, que nunca pelea pero que cuando hay algún problema se conversa y se soluciona. A excepción mía que me da ataque y me pongo a gritar haha, pero se me pasa altiro, porque casi siempre….o mejor dicho siempre, son mis papás los que tienen la razón y no yo. Ahg, odio admitirlo.

Mis papás son super jóvenes. Mi mamá se casó con mi papá cuando ella tenía 20 y el 24, me tuvieron a esa misma edad y al poco tiempo después llegó mi hermano que es 3 años menor que yo y luego mi hermana que es 5 años menor. Hoy en día a pesar de ser menores, ambos son mucho más maduros e incluso se ven mayores que yo. Nuestras personalidades son MUY distintas, pero aún así siempre hemos sabido llevarnos bien.

Como fui la primera, obvio que también fui la más mimada, cada vez que quiero algo tengo que tenerlo, eso me convirtió desde chica en una experta en manipulación y me permitió mejorar cada vez más aquella mirada inocente que le doy a mi papá cuando quiero que me de algo. Soy tan pero tan seca que hasta el día de hoy me funciona.

Daddy nos mantiene a todos, bueno a mi ya no pero igual hay hartas cosas en las que yo no gasto porque las paga el. Tuve la suerte de que me pagara mi carrera y eso me permitió salir de la U sin deudas y poder trabajar para mi y invertir mi plata en la fundación Tardes de Shopping para Mila. La mitad de las cosas que me ha enseñado no las he pescado y a porrazos he tenido que aprender. Me he tropezado mil veces con la misma piedra y jamás he sido capaz de aprender de sus errores, por mucho que me lo diga. Yo siempre tengo que hacer lo que quiero y no lo que debo. Y no importa cuántas veces me haya advertido que no haga algo, cada vez que cometo un error, siempre está el ahí para ayudarme, incluso cuando me dice «es la última vez». A veces pienso que debería haberme mandado a la cresta un millón de veces por todas las tonteras que he hecho, aunque claro que nada ha sido muy grave pero el tema es que soy porfiada. Y aún así, mi papá siempre está ahí, me habrá convertido en una malcriada tal vez, pero de verdad no me imagino que sería de mi si no fuera por el. En serio que no.

Mi mamá es un amor y el complemento perfecto para mi papá. Mientras que el es super grave, mi mamá es relajada. Y cada vez que se toma muy en serio las cosas, siempre está ahí mi mamá para decirle «Jorge relájate» y eso me encanta, porque gracias a eso me ahorré muchos retos y castigos cuando era más chica. Y por castigos me refiero a cuando mi papá me decía que me iba a quedar sin salir en tres meses y a los tres días le decía que iba a salir y a el ya se le había olvidado el castigo. Quizás no lo había olvidado, pero le daba pena decirme que no podía salir. Ese es el tema, mi papá es super impulsivo y cuando se enoja…..es atroz. Igual que yo. Pero al rato se le pasa, igual que a mi.

En cambio Yoyita es relajada, es tan tiernaaa y es una excelente mamá. Siempre trató de no mimarme pero tampoco le resulta mucho, aunque si admito que es más firme que mi papá. Por eso siempre preferí irme de shopping con el que con ella, porque sabía que así salía ganando siempre. De mi mamá heredé todo mi lado artístico, ella es una excelente cocinera, es en verdad SECA. Y desde siempre le gustaron las cosas manuales, recuerdo que siempre estaba inscrita en cursos de arte y todo tipo de manualidades. También recuerdo que desde chica me inscribió en muchas clases de pintura y lo pasaba super, porque yo quería ser como ella, siempre hizo cosas tan lindas! Y al igual que yo, ama decorar la casa para todo tipo de fiestas, ósea de ella saqué ese espíritu festivo. Y de sus hermanos heredé lo buena para el carrete, de mi padrino específicamente.

Mi hermano es muy especial, desde chicos nos peleábamos mucho pero nos reconciliábamos altiro. Siempre lo quise mucho aunque no tuviéramos muchas cosas en común. Lo bueno es que habían varias cosas que sí nos unían como los videojuegos y algunos programas de televisión. Ah y un set de béisbol que tenía y nos encantaba. Cuando crecimos, empezamos a llevarnos mucho mejor porque había algo que nos unía mucho: El carrete. Ay, que cosa más linda. Aún recuerdo el orgullo que sentí la primera vez que vi llegar a mi hermano a la casa curao haha, pensé «es de los míos» y sonreí silenciosamente mientras mi mamá lo retaba por haber llegado en ese estado. Cosa que yo nunca hice porque al menos sabía como pasar piola.

Bueno resulta que ahora mi hermano se volvió vegetariano. Y no es que me moleste que ya no coma carne, de hecho lo apoyo. Lo que me da lata es que pasó de una época de carrete muy rancio a este cambio completamente radical y que de repente sale con sus comentarios hipster que los que comen carne son malos o que si boto un papel a la basura en vez de reciclarlo me voy a pudrir en el infierno. Pero lo quiero, aunque a veces me saque de quicio, de verdad lo quiero tanto que incluso he hecho esfuerzos gigantescos por no mandarlo a la cresta y poner de mi parte por llevarnos bien. De todas maneras seguimos teniendo una que otra pelea poblacional, pero nada que no se arregle regalándole al otro un pan con queso, que en nuestra cultura representa una ofrenda de disculpa. Luego de eso todo vuelve a estar super bien.

Con la Daniela en cambio, tampoco tenemos muchas cosas en común, pero nos complementamos perfectamente. Ella definitivamente me ha hecho ser una mejor persona. Es linda, tierna, cariñosa y tiene cero paciencia y pelos en la lengua. Me encanta eso de ella. Siempre fue la que me criticó por exigirle demasiado a los papás, o la que me retó cuando sentía que yo lo necesitaba….es definitivamente mucho más madura y centrada que yo. A pesar de nuestra diferencia de edad, claramente ella es la que actúa como la hermana mayor aquí. Me encanta estar con ella, cuando estamos juntas compartimos mucho, hacemos planes juntas, vamos a tomar un helado, al cine, vemos películas en la casa, cocinamos juntas, o simplemente nos visitamos en nuestras piezas porque nos encanta estar juntas y hablar estupideces. De verdad no tengo palabras para describir lo que siento por ella porque es muy especial.

No es que la quiera más que a mi hermano, pero nos complementamos mejor y eso me encanta. Es y siempre será mi mejor amiga.

Del resto de mi familia, abuelos, primos, tíos….voy a hablarles en otro post, cuando les hable de mi sufrida y trágica infancia haha.

Como comentario final, quisiera decirles que amo a mi familia y me amo a mi misma. Me amo porque soy segura de mi misma, ambiciosa, honesta, directa, espontánea y alegre, entre muchas otras cosas (buenas y malas). Pero no sería absolutamente NADA de lo que soy, si no fuera por la maravillosa familia que tengo y se lo debo todo a ellos.